Cuando miras para detrás puedes intuir todo lo que has caminado. Si te paras y te vuelves, no para arrepentirte de lo avanzado, no para autolastimarte de tus errores y tropiezos en el camino, sino para ver lo recorrido, y de qué forma has llegados y a dónde has llegado. Estás en el punto de partida de saber dónde te encuentras, qué pretendes, a dónde puedes llegar sin saber exactatamente la meta, pero si el objetivo.
Es el momento de volverte de frente, para zambullirte en tu interior y husmear tus interrogantes, tus respuestas, tus aspiraciones, tus esperanzas y, rumiadas todas con alegría y convencimientos, reanudar de nuevo el camino esperanzado en el encuentro del gozo que buscas.
Cada parada necesitará de un volverse y mirarse, para continuar, desde el presente construyendo el futuro, pero siempre apoyado en la Piedra Angular que lo contiene todo y le da sentido verdadero y gozoso.
Sí, Salvador: la experiencia es la madre de la ciencia, y los "parones" en el camino no deben ser más que lecciones a aprender. Cuando encuentras tu lugar en la vida, cuando reconoces que lo importante es el amor y el servicio, entonces no hay tiempo para mirar atrás, ya no tienes tiempo para lamentarte porque la felicidad lo inunda todo y sólo ves el camino que tienes por delante. Gracias por tu reflexión, siempre profunda y transparente. Un cordial saludo.
Estimada y bella escritora: También te deseo una feliz navidad. Espero que mis opiniones te sean de tú agrado... y aquellas que por las razones que sea te hagan sulfurar, (imposible evitarlo, está en mi naturaleza... soy el típico Acuario) al menos te lleven a meditar las razones que me llevan a hacer público pensamientos tan inusuales. Feliz navidad
Cuando miras para detrás puedes intuir todo lo que has caminado. Si te paras y te vuelves, no para arrepentirte de lo avanzado, no para autolastimarte de tus errores y tropiezos en el camino, sino para ver lo recorrido, y de qué forma has llegados y a dónde has llegado. Estás en el punto de partida de saber dónde te encuentras, qué pretendes, a dónde puedes llegar sin saber exactatamente la meta, pero si el objetivo.
ResponderEliminarEs el momento de volverte de frente, para zambullirte en tu interior y husmear tus interrogantes, tus respuestas, tus aspiraciones, tus esperanzas y, rumiadas todas con alegría y convencimientos, reanudar de nuevo el camino esperanzado en el encuentro del gozo que buscas.
Cada parada necesitará de un volverse y mirarse, para continuar, desde el presente construyendo el futuro, pero siempre apoyado en la Piedra Angular que lo contiene todo y le da sentido verdadero y gozoso.
Un fuerte abrazo en XTO.JESÚS.
Sí, Salvador: la experiencia es la madre de la ciencia, y los "parones" en el camino no deben ser más que lecciones a aprender.
ResponderEliminarCuando encuentras tu lugar en la vida, cuando reconoces que lo importante es el amor y el servicio, entonces no hay tiempo para mirar atrás, ya no tienes tiempo para lamentarte porque la felicidad lo inunda todo y sólo ves el camino que tienes por delante.
Gracias por tu reflexión, siempre profunda y transparente.
Un cordial saludo.
Estimada y bella escritora:
ResponderEliminarTambién te deseo una feliz navidad.
Espero que mis opiniones te sean de tú agrado... y aquellas que por las razones que sea te hagan sulfurar, (imposible evitarlo, está en mi naturaleza... soy el típico Acuario) al menos te lleven a meditar las razones que me llevan a hacer público pensamientos tan inusuales.
Feliz navidad
Jungla salvaje.... Que miedo carajo! jajajaja
ResponderEliminarSaludos y un abrazo enorme.
Espero que pasaras una estupenda entrada de año.