
hayan o no abandonado
esta tierra de palabras
y sentimientos enfrentados,
donde no cabe el retiro
ni para el más atormentado…
A esos que sueñan despiertos,
y a los que no despertaron:
brotar debemos a ciento
los versos más angustiados,
dejando un sitio primero
para el amor exaltado…
Los hay de muchas tendencias,
de ardua victoria o fracaso,
pues se componen de vida,
de enfermedad y desengaño,
y sólo los más optimistas
pueden obrarnos milagros…
Y ya nada los destruye
una vez bien asentados,
sobreviven al mal tiempo,
al paso infiel de los años…
No existe espada que borre
lo que pluma ha bordado.
Son producto del aire,
pues éste se halla atestado
de unas musas que viven
del pensamiento humano,
y lo guían, y lo conducen
al punto de lo más alto…
Hay quien vive sin la poesía
que alguien le ha arrebatado,
y éste merece el castigo
más fiero y más despiadado,
pues no hay sueños ni vida
sin la inspiración de tu lado…
Quién no ha soñado despierto
con un mundo mejor,
donde lo más incongruente
sea borrado con AMOR,
jugando a ser soñadores
que desconocen el dolor…
Que viva siempre la poesía
en estos labios encarnados,
que todo lo que vea u oiga
por poesía esté formado,
que no tenga yo más vida
que la que en versos he forjado.